Entendemos la transición energética como el uso de recursos, humanos, materiales y tecnológicos que contribuyan con la creatividad y el desarrollo de nuevos aprendizajes, donde los seres humanos consideremos la naturaleza como otro ser vivo que debe ser cuidado y resguardado, de manera que se respeten sus límites y no se rompa el equilibrio natural. Esto significa un cambio en nuestros patrones culturales respecto a nuestra forma de producir y de consumir.