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Exhibición virtual de experiencias comunitarias de Transición Energética Justa > Destacada > Briquetas de carbón “Ajisosos”

Briquetas de carbón “Ajisosos”

A partir de la construcción de la hidroeléctrica El Quimbo, algunas personas comenzaron a reflexionar acerca de los proyectos energéticos, sobre todo esos que generan tanta cantidad de energía, pero las comunidades solo reciben los daños ambientales, sociales y económicos. Así, en el Huila son muy altos los costos que deben pagar los usuarios por la energía eléctrica pese a tener una represa generadora de energía tan grande en su territorio, que dejó daños ambientales irreparables, hectáreas de tierras fértiles inundadas, contaminación por pérdida de fauna y flora que quedó descomponiéndose en el agua y miles de árboles talados.

Además, muchísimas familias fueron desplazadas, perdieron su sustento y nunca ni siquiera recibieron indemnizaciones, dejando a un alto porcentaje de adultos mayores en una situación de desesperanza por las dificultades que trae el cambio de sus formas de vida y la falta de oportunidades laborales.

Todo ello les llevó a cuestionar las formas que tenían de hacer las cosas y poder ayudar a mitigar los impactos ambientales y a recordar su ancestralidad, cómo vivían sus abuelos, que tenían unas costumbres donde la generación de energía necesaria para los hogares no causaba tantos impactos y destrucción al ecosistema.

Empaga ha generado lazos de fraternidad, esperanza y solidaridad pero también ha sido un referente para hacer pedagogía y enseñar a las personas de la comunidad cómo hacer energía alternativa sin dañar el ambiente. En ese marco, las briquetas de carbón “Ajisosos” son su tercera experiencia de energía alternativa y les ha ayudado a llevar el mensaje de energía limpia a más personas. Comenzaron con el deshidratador solar, luego con el bicimolino para la transformación del ají y esperan continuar haciendo transformaciones.

Características técnicas de la propuesta

En el momento la experiencia cumple con la capacidad de elaboración de briquetas suficientes para mantener el funcionamiento del horno donde se secan y se procesan los productos alimenticios “Ajisosos”, emprendimiento comunitario de cultivo, cosecha y transformación de ajíes y frutas de la zona, así como las necesidades de consumo en los hogares de los miembros de la organización y la comercialización de algunas de ellas.

Las briquetas se elaboran realizando un proceso de secado y tostado de la biomasa sobrante de procesos productivos de la región como por ejemplo algunos trapiches, también utilizando biomasa resultante de las talas de árboles realizadas para la hidroeléctrica El Quimbo. Este proceso es realizado en un deshidratador solar. Tras el proceso de secado y tostado de la biomasa, esta es procesada en una peletizadora que pulveriza el material para la elaboración de las briquetas.

Además del deshidratador solar y de la peletizadora se utiliza una briqueteadora que es la que da la forma y tamaño final de la briqueta.

Procesos productivos, comunitarios, ambientales, o actividades económicas que fueron impactadas de forma positiva con la implementación de la experiencia comunitaria de TEJ

Las briquetas de carbón “Ajisosos” nacen como una alternativa para generar la energía necesaria para el horno donde se seca el ají y se transforman alimentos, por ejemplo, mermeladas de ají con frutas de la zona.

“Ajisosos” es un proyecto productivo que cultiva, transforma y elabora alimentos con ají como materia prima principal y briquetas de carbón.

Las briquetas se elaboraron inicialmente como una alternativa que supliría la necesidad de energía eléctrica para el horno de secado y transformación, luego para suplir las necesidades de leña en las fincas de las personas, pues muchos no tienen energía eléctrica, pero se convirtieron también, en una alternativa de mejorar la calidad de vida de las personas generando ingresos económicos para quienes hacen parte del proceso comunitario, devolviéndoles la posibilidad de un trabajo digno.

Personas beneficiarias de la experiencia

25 familias compuestas por: 30 mujeres, 22 hombres, 12 jóvenes (entre los 13 y los 18 años) y 20 niños y niñas (entre los 0 y los 12 años)

  1. Han logrado comenzar una concientización en la población en torno a la transición hacia energías limpias, pues cada persona que utiliza las briquetas recibe información sobre la necesidad de no talar árboles para leña y de reutilizar. La comercialización les ha permitido compartir su experiencia y que otras personas se quieran integrar al cambio, como en el caso de algunos productores de panela que les han donado la biomasa que les queda del proceso productivo y que para ellos algunas veces se convierte en problemática, por no tener la adecuada disposición de estas materias orgánicas que puede generarles sanciones.
  2. Otro logro importante de la experiencia ha sido poder mitigar la contaminación ambiental por uso de materias que ya no van a generar contaminación, darle buen uso a la biomasa resultante de diferentes procesos y proyectos con el caso de la hidroeléctrica El Quimbo que generó alta cantidad de este material.
  3. El tercer logro que resaltan es a nivel comunitario, ya que este proyecto le ha dado la oportunidad a las personas de creer en ellas mismas, sin importar la edad. Este proyecto cuenta en su mayoría con mujeres, jóvenes y adultos mayores.
  1. El primer problema que identificaron fue la ubicación de la planta de elaboración de las briquetas. Inicialmente pensaron que la mejor estrategia era estar en el casco urbano donde hay mayores posibilidades de comercializarlas, pero al intentar realizar el proceso identificaron que requerían mayor espacio y ubicación. Esta situación la solucionaron haciendo la elaboración en Empaga, en la zona rural, pues tendrían espacios más grandes para el almacenamiento del material y la transformación.

    Al inicio no les fue fácil determinar los tiempos y la división del trabajo, hasta que se organizaron y eligieron unos días a la semana para hacer la minga, lo que les ha permitido ser más organizados y hacer un mejor trabajo.
  2. El transporte de la biomasa desde el lugar en el que se genera hasta el lugar donde se procesa; algunas veces el transporte debe realizarse en una camioneta turbo aumentando los costos de producción.
  3. Frente a la parte técnica, como emprendimiento del sector agropecuario han sentido que no hay capacitaciones pensadas en sus necesidades de aprendizajes específicos. Algunas veces el SENA y la Cámara de Comercio realizan capacitaciones de temas generales en la región, sin entender quiénes son y qué hacen, por ejemplo, les ofrecen capacitaciones en tecnologías para personas que no cuentan con equipos o energía eléctrica.
  4. En el momento han identificado que su mayor problema es la falta de un espacio cerrado en el cual hacer las briquetas con buenas prácticas y mayor salubridad, pues están trabajando al aire libre y no tienen las condiciones requeridas para hacer un proceso más óptimo.

Participación de mujeres en la experiencia comunitaria TEJ

El proceso de involucramiento de las mujeres en esta experiencia ha sido muy satisfactorio, pues cuando se iniciaron las mingas siempre los hombres decían: “las mujeres para la cocina, para preparar los alimentos y los hombres para el cultivo”.Las primeras veces fue así, hasta que un día decidieron que eso no era lo que querían de un trabajo comunitario donde todos tenían que hacer lo que les gustaba y sabían hacer, entonces comenzaron a turnarse la cocina.

La hora del almuerzo siempre es su espacio de diálogo y de reflexión, así que en estos momentos de compartir empezaron a identificar sus fortalezas: algunas mujeres eran buenas para arar y cultivar, otras para procesar y elaborar y, así mismo, identificaron las debilidades que tenían para hacer otras cosas. Poco a poco estos momentos se volvieron un lugar para dialogar, expresar su sentir y tejer lazos de solidaridad.
Comenzaron a compartir los saberes pensando en ayudar a las otras mujeres y pronto estaban aprendiendo a tejer, a cocinar, a elaborar ollas de barro y han creado un huerto de hierbas aromáticas.

El papel de la mujer en esta experiencia comunitaria es de fraternidad, de enseñar, de aprender y desaprender, se han vuelto amigas, hermanas, madres y abuelas.