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Mujeres investigadoras rurales

Somos un grupo de personas que nos identificamos en varios aspectos en común frente a la opinión sobre la gobernabilidad en los territorios y la Convivencia y defensa del ambiente.

En el periodo de pandemia trabajamos un Proyecto que tiene por nombre “Mujeres Investigadoras” en este Proyecto nuestro objetivo principal es el rescate de los saberes ancestrales de la medicina tradicional por medio de las plantas medicinales y es una Ventana muy importante para fortalecer el proceso organizativo en defensa del territorio, en el transcurrir de la investigación hemos involucrado directamente cerca de 70 personas y hemos tenido buena acogida en la población urbana y rural , nos abordan para darnos las recetas , nos donan plantas , participan en los talleres y el ejercicio ha sido satisfactorio porque cada una de las mujeres a podido investigar sobre diferentes temas en el contexto del territorio , llegando a una reflexión profunda “Se necesitan los territorios para la vida de las especies y para cultivar , hay trece jardines medicinales y cada uno de ellos representa para las mujeres la sanidad de los cuerpos y la fertilidad del territorio”

Hasta el año 2021 terminamos las segunda fase del Proyecto, como resultado construimos 13 huertos medicinales y un recetario como recopilación de la investigación.

Hasta la fecha les hacemos mantenimiento comunitario y replica en las viviendas donde la mayoría de las casas tienen una huerta medicinal.

Creemos que el Cambio de patrones de uso y consumo energético , se relaciona con nuestra apuesta de dejar de ser dependientes de fármacos como un camino hacia la transición energética justa, por medio de la investigación popular podemos llegar a rescatar valores como los que tiene con sigo la medicina tradicional ancestral con el uso de las plantas medicinales , además de otros usos de las plantas que aportan a la reducción del plástico siendo este un derivado de los hidrocarburos.

Desde nuestro procesos social le apostamos a la deshidratación de las plantas medicinales para conservarlas y utilizarlas en nuestro diario vivir comunitario, además de volver a la totuma como alternativa clara hacia la reducción de los plásticos en nuestros entornos rurales y urbanos.

Características técnicas de la propuesta

Se realizó con 77 personas de las comunidades y se necesita amor y dedicación, el potencial humano para cultivar y enraizar con las plantas, es necesario el territorio para instalar el huerto, herramientas como palas, machetes, paladragas, tijeras de podar, malla entre otras cosas.

Procesos productivos, comunitarios, ambientales, o actividades económicas que fueron impactadas de forma positiva con la implementación de la experiencia comunitaria de TEJ

Representa ahorro, porque en torno a la huerta medicinal se crea el hábito de sembrar para resistir y además se dejan de consumir pastillas a base de químicos y las personas mejoran la salud, todo esto representa menos gastos y más vida.

Personas beneficiarias de la experiencia

30 mujeres, 15 hombres, 22 adolescentes y jóvenes (entre los 12 y 18 años), 10 niñas y niños (entre los 0 y los 12 años)

  1. Logramos unir a las comunidades en torno a la huerta medicinal.
  2. Resignificar la correlación que tienen las comunidades rurales con el territorio que habitan.
  3. Convocar a mujeres mayores, niñas y jóvenes, transmitiendo los conocimientos sobre las plantas medicinales a través de las edades.
  1. Se dificulta mantener el proceso en la fase social de formación comunitaria.
  2. Faltan recursos económicos para impulsar nuevos huertos en otras veredas en el territorio.
Participación de mujeres en la experiencia comunitaria TEJ

Las mujeres y los saberes ancestrales son el corazón del proyecto, la transformación desde sus sentires es evidente, en los espacios comunitarios, el manejo de las emociones y la participación en escenarios de incidencia y lucha por el territorio.